martes, 2 de junio de 2015
Cómo fracasar antes empezar un proyecto o por qué no hay que anunciar las cosas demasiado pronto
Entendiendo el fracaso como el hecho de no hacer o no terminar algo que empiezas, estoy casi acostumbrándome a fracasar bastante últimamente. Y es que, aparte de los asuntos cotidianos que le apartan a uno, una y otra vez, una detrás de otra, de las instalaciones de mi home studio, resulta que anunciar las cosas que vas a hacer antes de realizarlas o completarlas, resulta muy negativo, desde el punto de vista psicológico.
Resumiendo todo en una sola frase, es como si al decir que vas a hacer algo, te engañas a ti mismo hasta el punto de que, inconscientemente, sientes una especie de falsa satisfacción, similar a la que obtienes al conseguir el objetivo de verdad, que te corta de un plumazo la motivación para continuar.
Estos dos artículos (Hablar de Tus Metas Te Aleja De Ellas | ¿Quieres cumplir tus metas? ¡Deja de hablar sobre ellas!) me los pasó un amigo en una conversación semi privada en G+ (sólo mis círculos pueden acceder a ella). Es algo que intuía desde hace tiempo que puede pasar, y es que anunciar a los cuatro vientos ese grandísimo proyecto que vas a realizar, con toda la ilusión del mundo, puede resultar el peor de los errores.
Visto el asunto desde esta perspectiva, me resulta hasta un milagro que terminara en su día el álbum Amanecer Contigo, después de la paliza que di por todas partes, por activa y por pasiva. También podría explicar el "éxito" de Soledad en Diciembre, trabajo del que apenas adelanté nada, y que terminé en apenas dos semanas. Solamente Jamendo estuvo a punto de fastidiarme el estreno, con sus bugs. Pero eso es otro tema...
Pues eso, en adelante, si tengo algo interesante entre manos, ya os lo encontraréis hecho y publicado. Sin más ;)
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