Aunque queda físicamente fuera de las instalaciones del GDF Estudio, este aparato forma parte de él. Y además, una parte muy importante, hasta el punto de que me resulta mucho más fiable el sonido que saca, a través de los altavoces de la casa del automóvil, que el que me ofrece mi sistema de escucha. Se trata de una radio CD-MP3 Panasonic CQ C1323NW, un modelo de gama media, más bien tirando a baja, pero que hace muy bien su trabajo, y no suena nada mal.
Cuando tengo una mezcla que creo ya tener medio lista, la suelo grabar en un CD-RW, en forma de fichero mp3 a 320 kbps (a veces grabo CD de audio estándar, si quiero máxima calidad), y la escucho, mientras realizo mi traslado diario al lugar de trabajo, o cuando realizo algún viaje de más de 15 minutos.
Normalmente me encuentro cosas que no escucho en el home studio, como que el bajo que me sonaba tremendo en casa, en el coche ni suena, la caja tal vez estaba demasiado alta o que hay un crash que ni existe en los altavoces de mi turismo (o al contrario, que suena demasiado). Luego tal vez descubro esas frecuencias molestas en ese solo de guitarra que en el estudio no se escuchaban... Bueno, son sólo ejemplos de cosas que me han pasado, y me seguirán pasando, aunque trato de minimizar en lo posible estos fallos.
Normalmente me encuentro cosas que no escucho en el home studio, como que el bajo que me sonaba tremendo en casa, en el coche ni suena, la caja tal vez estaba demasiado alta o que hay un crash que ni existe en los altavoces de mi turismo (o al contrario, que suena demasiado). Luego tal vez descubro esas frecuencias molestas en ese solo de guitarra que en el estudio no se escuchaban... Bueno, son sólo ejemplos de cosas que me han pasado, y me seguirán pasando, aunque trato de minimizar en lo posible estos fallos.
Lo importante es que, mientras escucho, voy tomando nota mental de lo que hay que mejorar, y una vez tengo acceso al home studio, corrijo esas deficiencias y/o excesos, vuelvo a volcar, y lo grabo en el mismo CD-RW, junto a la versión anterior, para poder comparar. A fin de no equivocarme de versión, suelo anteponer en el nombre algo que identifique el archivo y lo diferencie del anterior. El método que más uso es anteponer la fecha, en formato invertido (año-mes-día), al nombre.
Un ejemplo podría ser 20120915-prueba.mp3. De esa manera puedo diferenciarlo fácilmente, en la pantalla del radio CD (con los tags desactivados), de una que se llamara 20120913-prueba.mp3. Además de ordenarse cronológicamente para la reproducción, lo que nos viene de lujo. Aunque la opción de usar los tags del mp3 está ahí, suele ser más rápido y fiable el renombrado de los archivos.
Un ejemplo podría ser 20120915-prueba.mp3. De esa manera puedo diferenciarlo fácilmente, en la pantalla del radio CD (con los tags desactivados), de una que se llamara 20120913-prueba.mp3. Además de ordenarse cronológicamente para la reproducción, lo que nos viene de lujo. Aunque la opción de usar los tags del mp3 está ahí, suele ser más rápido y fiable el renombrado de los archivos.
Cuando hago ajustes de mastering el proceso es muy similar, solo que me limito a un nivel fijo de volumen (en mi caso al 22 o 23 de un máximo de 40) para no pasarme de la raya ni quedarme corto, además de prevenir así daños a los altavoces. También lo hago así para no engañarme con el nivel medio del álbum.
Estar tocando el volumen en todo momento mientras escucho puede llevarme a engaño, así que no voy tocando el control mientras lo pueda evitar. Aunque sí que encuentro conveniente escuchar, tanto mezclas como master, en diferentes gamas de volumen, para comprobar cómo se escucha en diferentes circunstancias. Pero si cuando acaba un tema y empieza el siguiente del mismo álbum me veo obligado a subir o bajar el volumen, aunque sea un poco, algo estoy haciendo mal... Conviene volver al archivo del master del álbum y corregir los volúmenes.
Todo esto lo aplico a cualquier equipo de reproducción de audio del que me puedo aprovechar para escuchar mis mezclas -auriculares, equipos HIFI, radio CD portátiles, etc-. El sonido correcto está a medio camino entre todos ellos. Aunque todo tal vez sería un poco más fácil si tuviera monitores fiables, pero de momento no se contemplan, ni de lejos, en los presupuestos del estudio.
Estar tocando el volumen en todo momento mientras escucho puede llevarme a engaño, así que no voy tocando el control mientras lo pueda evitar. Aunque sí que encuentro conveniente escuchar, tanto mezclas como master, en diferentes gamas de volumen, para comprobar cómo se escucha en diferentes circunstancias. Pero si cuando acaba un tema y empieza el siguiente del mismo álbum me veo obligado a subir o bajar el volumen, aunque sea un poco, algo estoy haciendo mal... Conviene volver al archivo del master del álbum y corregir los volúmenes.
Todo esto lo aplico a cualquier equipo de reproducción de audio del que me puedo aprovechar para escuchar mis mezclas -auriculares, equipos HIFI, radio CD portátiles, etc-. El sonido correcto está a medio camino entre todos ellos. Aunque todo tal vez sería un poco más fácil si tuviera monitores fiables, pero de momento no se contemplan, ni de lejos, en los presupuestos del estudio.
Antes de terminar este post me gustaría comentar que fue grabando uno de estos CD-RW para el coche cuando me cargué el anterior ordenador del estudio. Ya me gustaría renovar este aparato por uno provisto de puerto USB, porque aún hoy tengo problemas para grabar con seguridad cualquier cosa y poder escucharla, pero tal como pasa con los monitores, tampoco está contemplado en los planes y, mucho menos, en los presupuestos del estudio, así que a apañarse con lo que hay, que no es poco.
Interesante truco para aprovechar el equipo del sonido del auto y aprovechar el tiempo de manejo para escuchar las propias grabaciones!
ResponderEliminarContar con unos monitores geniales es lo ideal... pero si tu habitación-home studio no esta acústicamente acondicionada quizá la relación costo-beneficio de invetir una suma considerable en dichos monitores no resulte nada ventajosa.
Hay monitores de prestaciones, carcateristicas y precio ideales para el home studio y que son una buena referencia para trabajos de mezcla y mastering con buenos resultados. Basta conocer un poco los monitores para ahorrarte algo de tiempo en hacer pruebas de escucha en todos los medios disponibles.
Croe que actualmente hay que mezclar para ipods ( y sus audifonos) y bocinas de computadora portátil jejej ; )
Saludos.
Hola, Miguel. Disculpa la demora en aparecer por aquí.
ResponderEliminarYa quisiera poder permitirme unos monitores, pero es un poco lo que dices, no tengo garantías de que me sirviera de mucho, al no tener la habitación acondicionada acústicamente, así que me toca aprovechar lo que tengo, incluyendo el estéreo del coche :)
La verdad es que, si no fuera porque buscamos un buen sonido por nuestro propio gusto, deberíamos no molestarnos tanto, porque hoy en día no se usan tanto los equipos HIFI, se "escucha" música en casi cualquier lugar imaginable, con los peores altavoces que existen, y no parece molestar a quien "escucha"...
...Pero aunque sólo sea por un melómano que nos pueda escuchar, que aprecie un buen sonido, y por nosotros mismos, creo que seguiremos grabando, mezclando y masterizando con el mejor sonido que seamos capaces, ¿a que sí?
Un saludo.
Hola buenaas tengo esta radio y necesito memorizarla para que al encerderla se quede donde estaba!! Un saludo
ResponderEliminarHay un conector de la radio que se debe conectar a la batería para que cuando se apague el contacto no se borre la memoria. Si no sabes cuál es, lo mejor es que te lo conecte alguien que sepa, o corres el riesgo de quemar el equipo.
EliminarSaludos.