Os he escrito varias veces acerca de Dave Imbernön en este blog. Algunas veces simplemente comentando algo de pasada sobre él. Pero las más destacadas, sin duda, fueron cuando os presenté por aquí el nuevo álbum de su banda, Enuma Elish (An Endless Tomorrow), y cuando él mismo, en calidad de blogger invitado, nos presentaba el proyecto Bipolarity Records, su propia netlabel libre, ya desaparecida de la Red.
Pero, hasta ahora, no os había presentado ninguno de sus trabajos musicales en solitario. Creo que ya ha llegado el momento, y qué mejor manera de retomar esta sección del blog, dedicada a los músicos y grupos con licencias Creative Commons, que con Tears & Other Things.
Crear una pieza instrumental completa con un solo instrumento, y que ésta suene llena y completa al ser interpretada, no es algo precisamente fácil. Se requieren muchos años de duro aprendizaje, tanto en materia de composición y teoría, como en la interpretación del propio instrumento. En el caso del piano es especialmente complicado, y puedo decirlo por experiencia propia.
Sin embargo, Dave Imbernön hace que el arte de crear, ya no una pieza sola, sino todo un señor álbum, con la única compañía de un piano, parezca hasta fácil. Todo ello mientras toca cada uno de los acordes, y cada una de las notas, de manera que parece que emplea toda su alma en la ejecución de cada una de ellas.
Esta es la impresión que me da después de haber escuchado Tears & Other Things al menos unas cuatro veces, porque es uno de esos trabajos musicales que sirven lo mismo para disfrutarlos al máximo con todos los sentidos, dejándote llevar, como para que te sirva de compañía mientras realizas otras tareas.
Podéis escucharlo, descargarlo y disfrutarlo libremente, solos o en compañía, porque está bajo licencia Creative Commons By-Nc-Nd. Jamendo es una de las plataformas donde está disponible, junto al resto de su extensísima y variada discografía en solitario.
Amigo un piano es un piano. Cuando se toca de forma virtuosa pocos instrumentos lo pueden igualar. El padre de un amigo de mi hija era un virtuoso del piano que conseguia ponerte los pelos de punta con sus composiciones, Por desgracia un accidente de moto...
ResponderEliminarSiento ese triste desenlace...
ResponderEliminarUn piano bien tocado suena a veces hasta mejor que una gran orquesta, sin estar tan sobrecargado. Pero se requiere de dos manos y dos pies (recuerda que el piano tiene pedales de sostenido, unicordio y de resonancia, si se trata de uno de cola) bien adiestrados, y esto sólo se logra tras años de mucho estudio y esfuerzo.
Dave Imbernön forma parte de este perfil de músicos, siendo además muy expresivo y visceral, tanto en sus interpretaciones como en las composiciones. Sinceramente, este hombre debería ser ya mucho más conocido de lo que es, y llenar él solito el Palau de la Música, pero lo que hace no es "comercial", ya sabes...
Que pases una feliz semana... A pesar de todo.